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👋 Guadalajara | Ciudad de México

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Blog de Innevo

Pequeñas figuras de persona de juguete representando a las empresas pequeñas y medianas que pueden mejorar con CMMI.

¿Es Cierto que CMMI es Solamente Para Empresas Grandes?

¿Es imposible ser mejor si se es pequeño? La respuesta es: Realmente, no.

Pues bien, es lo mismo para CMMI. No sería lógico que un modelo de mejora exigiera que para mejorar se deba ser grande. Por esa razón, la certificación en CMMI no exige un tamaño determinado de la empresa, ya sea que se mida en número de empleados, facturación anual, número de clientes, cantidad y ubicación de oficinas o cualquier otro criterio de tamaño.

El modelo originalmente fue diseñado para satisfacer una necesidad muy puntual: ¿Cómo lograr que un grupo de personas que tienen un objetivo en común puedan logar altos niveles de calidad en sus productos o servicios con la mayor eficiencia posible en beneficio de sus usuarios (o clientes)?

Una empresa, por compleja o sencilla que sea, puede generar productos o servicios de alta calidad si está formada por personal preparado en la utilización de procesos altamente disciplinados.

Un poco de historia

Watts Humprey, el creador del modelo CMMI, fue un físico que obtuvo posgrados en física y en administración. Llegó a ser el vicepresidente mundial de IBM para el desarrollo de software. Era miembro de la junta directiva del Software Engineering Institute (SEI) y ahí fundó el Software Process Program, que tenía como objetivo entender y administrar el proceso de ingeniería de software, porque “era en éste en el que las organizaciones grandes y pequeñas tenían las mayores dificultades para entregar productos y servicios de calidad y donde existían los mayores problemas”1 ya que casi siempre el software salía mal, o incompleto, o tarde, o caro… o todos estos resultados juntos.

Humprey creía que el desarrollo de software podía gestionarse de manera eficaz mediante procesos especializados para cada aspecto del Ciclo de Vida de desarrollo del producto o servicio, y que si se realizaba cada etapa de este con los procesos adecuados, el resultado sería altamente satisfactorio. Este programa dio como resultado la creación del Modelo de Capacidad y Madurez o CMM (Capability Maturity Model)

Posteriormente el modelo se extendió a otras actividades empresariales y no solamente al desarrollo de software y se convirtió finalmente en CMMI. La “I” es de Integration, “integración” en inglés, que significaba que esta incorporado a todas las actividades empresariales ya sea productos o servicios, y no solamente al desarrollo de software, como originalmente fue diseñado. 

Posteriormente el Departamento de Defensa del gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica lo impuso como criterio exigible a sus proveedores, para garantizar que la calidad de sus proveedores fuera la más alta posible. Pero cabe decir que esto nunca implicó cuestionar el tamaño del proveedor, solamente que cumpliera con CMMI.

¿Grande o pequeño? Cuando se trata de mejora, lo que sí importa es la visión de negocio. Si buscas ser competitivo y confiable para tus clientes, eres un candidato óptimo para buscar una certificación CMMI. Fotografía de una fila de pequeñas figuras de persona de juguete con una fuera de la fila representando una visión diferente de negocio.

¿Qué esperas para mejorar?

Y es que las prácticas del modelo CMMI no están limitadas a un tamaño o número de personas en particular para ser ejecutadas. Lo único que se exige es primero que se comprenda bien lo que la práctica exige y luego que el personal encuentre, según la operación y características de la empresa, la forma de llevarlas a cabo; pero el modelo nunca establece que cierto número de personas deban participar en la ejecución de dicha práctica, eso lo decide la empresa.

Así que, es un mito y una mentira que el tamaño sí importa en CMMI. La dimensión de la empresa es absolutamente intrascendente. Lo que sí importa es su visión de negocios. Si está dirigida a buscar un desempeño de gran competitividad y confiabilidad para sus clientes, ya es candidato óptimo para certificarse en CMMI.

Si una empresa está esperando a ser más grande, a vender más, a tener más clientes o cualquier otra razón, está perdiendo el tiempo. Para certificarse en CMMI, el mejor momento es ahora.

Recordemos que el cambio casi nunca fracasa porque sea “demasiado” pronto. Casi siempre fracasa porque es demasiado tarde.

1 Reflections on Management, Addison-Wesley Professional; 1a edición, (29 marzo 2010)

Enrique Román

Enrique Román | Sobre el autor

CMMI Certified Lead Appraiser and CMMI Certified Instructor

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